Por Gustavo
Ramírez
Uno
Su sala de reuniones estaba decorada con distintos cuadros de Perón y Evita y
otros tantos donde se apreciaban hinchadas de fútbol con banderas inscriptas
con la leyenda: “Clarín miente”. Más tarde uno iba poder apreciar que había
todo un merchandansing al respecto y para la ocasión.
Cuando apareció el mito, que uno compra en las versiones tradicionales del boca
a boca, se desdibujó por completo. Saludó a uno por uno. Un saludo extraño para
algunos. A otros les causó una gracia positiva.
- Guillermo Moreno – decía al estrechar la mano – peronista y kirchnerista –
agregaba como si hiciera falta la aclaración.
Por detrás de su diminuta pero segura figura asomaba un enorme cuadro donde
Néstor Kirchner estiraba su mano y saludaba a un pueblo imaginado.
Hay escenas y palabras que uno atesora en momentos particulares. Tal vez sea
ese el rol de la memoria, atesorar palabras, olores, gestos. Escenas.
- Compañeros – dijo con vos firme- tengan la plena convicción que lo más
importante para nuestro gobierno son las fuentes de trabajo.
Los concurrentes no emitían palabras. No porque nos la tuvieran sino porque
existía, en ese instante, una cautivación especial con el personaje.
- Aunque algunos hijos de puta escriban boludeces yo soy un tipo de
barrio.
Dos
En política no existen los universos paralelos, ni hay lugar para
especulaciones místicas. Nuestras fuentes aseguran que Moreno hacía rato quería
partir y que Cristina no lo dejaba. La renuncia del Secretario de Comercio emerge
en el contexto de diversos cambios en el Gabinete Nacional. Hay que comprender
que todo, como proceso natural y evolutivo, cumple su ciclo. El desgaste de
gestión tiene ingerencia en las decisiones.
Hay margen para las hipótesis, casi siempre. Pero con ello no se desanda el
camino. El nombramiento de Kicillof en la cartera económica, como coinciden
distintos análisis vertidos en La Señal, ni el renunciamiento de Moreno,
contienen, en su gestación política e ideológica, un cambio de rumbo. No es menos
cierto que hay que esperar a los posibles futuros anuncios que se puedan hacer
esta semana.
Tres
El nombramiento del ex duhaldista Capitanich en la jefatura de gobierno abre
las gateras para la competitiva carrera interna hacia el 2015.
Hay varios nombres dando vueltas. Los que hacen ruido, después del 27 de
octubre, son conocidas en el universo K: Urribarri, Randazzo, Scioli y el
propio Capitanich.
Lo que se sabe: el gobernador del Chaco tiene línea interna con la tropa del
PJ. Está claro, es necesario sumar y construir hacia adentro. Habrá que ver
hasta donde gira la cintura de Capitanich.
Si observamos la situación compleja de la provincia del Chaco el actual jefe de
gabinete no queda bien parado. La provincia es pobre y no goza, en plenitud, de
los beneficios de la Justicia Social. El ejemplo visible es Barranqueras. No
son contradicciones menores y hay que prestarle atención.
Tal vez esta designación tiene que ver con estas cuestiones. La jefatura de
gabinete, tal como lo señaló Gabriel Fernández en su programa La Señal, no es
un cargo que se pueda rechazar con facilidad. De haberlo hecho, Capitanich,
hubiera quedado mal parado con la conductora del movimiento. Sin embargo la
aceptación del cargo no implica que el gobernador tenga las cosas resultas en
su futuro electoral.
Cuatro
Se abre una nueva etapa con estas designaciones. En ella habrá que estar muy
atentos al diálogo que el gobierno establezca con todos los sectores sociales
pero muy en especial, con el Movimiento Obrero Organizado y Peronista. Muchos
apuestan a un sindicalismo no tan rezagado en la perfomance electoral.
Cinco
Moreno no va a estar ausente en la política nacional. Irá a Italia. Un dato no
menor. Su relación con el actual Papa es muy buena. Tal vez la jugada marque la
cancha por ese lado. Potenciar el diálogo con el Vaticano a fin de tener buenas
respuestas hacia adentro del núcleo eclesiástico local.
EL kirchnerismo hace política desde el centro de su inframundo. Universo donde
el discurso adquiere un valor altamente significante. Este inframundo es una
creación propia del andamiaje K. No hay discursos vacíos, tienen su correlato
en los hechos políticos. Eso sí. Hay una ficción creada para la militancia que
no entra al inframundo K. Si esa militancia no madura es posible que sufra en
el 2015.
Por ahora el kirchnerismo sigue siendo una fuerza sólida y estable, sobre todo
porque continúa en el camino donde la economía se somete a la política y la
política a las necesidades del pueblo.
* Feos Sucios y Malas / La Señal Medios